Gestiona tu negocio con KeyANDCloud y crea tu primera factura desde el programa de facturación online.
¿Qué es un impuesto?
El impuesto es un tributo (obligación pecuniaria) que se debe pagar al Estado y a las Administraciones Públicas. Son una “carga” para las personas y empresas (sujeto pasivo) pero necesarias para financiar el Estado (sujeto activo, es quien recibe los beneficios de los impuestos) y que pueda realizar sus funciones correctamente.
Este tipo de contribución ciudadana es de carácter obligatorio y se caracteriza por no ofrecer contraprestaciones directas sobre los habitantes, pero si se pueden beneficiar de forma general de los recursos que puede ofrecer la Administración gracias a los impuestos (p. ej. Escuelas Públicas, Seguridad Social, el paro…). Los impuestos son controlados por el sistema fiscal (Hacienda).
Hay diferentes tipos de impuestos:
- Según su naturaleza:
- Directos: estos impuestos gravan la riqueza del sujeto pasivo: la renta, el patrimonio, el IBI, los vehículos que se poseen, o los bienes heredados (impuesto de sucesiones).
- Indirectos: gravan el consumo de un bien o servicio. El impuesto no recae sobre la persona sino sobre el producto. Se puede controlar el comportamiento de las personas gravando más a productos que el Estado no quiere fomentar, p. ej. bebidas alcohólicas o tabaco; y gravando menos el tipo de conductas que sí quiere fomentar, p. ej. reducción de impuestos a las empresas nuevas para fomentar la aparición de nuevos emprendedores y autónomos.
- Según la capacidad tributaria o contributiva:
- Progresivos: el porcentaje de impuestos a pagarse es proporcional al tamaño de la renta o patrimonio.
- Regresivos: el porcentaje de impuestos a pagarse por el hecho imponible es inversamente proporcional al tamaño de la renta o patrimonio.