Las empresas deben contar con una organización empresarial, un plan para ello, una estructura y unos objetivos bien definidos antes de crearse. Esta organización se caracteriza por ser una unidad coordinada, compuesta por dos o más personas, donde existen normas que todos deben cumplir y que a su vez, les une un mismo objetivo que será logrado con unas estrategias definidas.
Antes de funcionar, los propietarios y directivos deben fijar las funciones que se desarrollarán para cumplir los objetivos. Según esto, se pueden analizar diferentes tipos de organización, formal e informal, aunque de estos dos modelos hay numerosas variaciones:
1. Formal: Todas las acciones que se introducen en el plan de empresa para regular todas las actividades como asignación de los roles, el diseño y la creación de los departamentos, escoger todos los responsables encargados de las diferentes funciones y definir esas funciones, dar nombre a la organización. Aquí se lleva la firma de todos los documentos.
2. Informal: Incluye la estructura social que perfecciona a las estructuras corporativas formales antes mencionadas. Aquí se incluyen las relaciones personales y profesionales y todas las interacciones que existen en la rutina diaria de cada empresa. Esta estructura informal debe ser flexible, para cualquier tipo de cambio que se produzca en el mercado y que esté en evolución y aprendizaje. No necesariamente está regulada de alguna forma, pues esta parte de regulación lo lleva la organización formal.
Además, hay que exponer las cuatro estructuras de un modelo organizacional, las cuales hay que definir con anterioridad de la creación de la compañía y que es fundamental para esta, porque encuadra los roles y las responsabilidades de cada trabajador.
1. Estructura funcional, la cual cubre todo lo que necesite la empresa en los diferentes niveles: el jerárquico, el modelo en línea o staff y el de estructura matricial. Aquí se incluye el grupo de empleados que realicen las tareas similares y con trabajos más parecidos, para mejorar la comunicación y, de ese modo, tomar decisiones más eficientes.
2. Estructura matricial, la cual agrupa a esos colaboradores según la función que realizan y también, por el tipo de producto que trabajan. Estos trabajadores poseen más autonomía y asumen mayores responsabilidades en el trabajo.
3. Estructura divisional, donde la empresa regula las relaciones entre los diferentes departamentos y grupos para que en conjunto se satisfagan las necesidades de los clientes.
4. Estructura de organización por proyecto. Aquí es donde los equipos de la empresa se juntan para realizar el proyecto o el producto, habiendo elegido para esto los miembros más apropiados.
Dentro de la elección de los roles y los responsables, la figura del líder es una de las más importantes y que requiere más tiempo para esa decisión. El líder lleva un papel de mando y quien delega las funciones a terceros. Dependiendo del líder, se podrán ir escogiendo los procesos de organización empresarial, pues es de los líderes que depende el funcionamiento de la organización y sus sistemas. De ahí, se podrá tomar un modelo más participativo, más o menos jerarquizado.
Las funciones del líder de una organización son variadas e implican muchos de los procesos importantes de la gestión organizacional:
1. Es el encargado de asignar tareas a los que integran la compañía.
2. Dirige el capital humano y gestiona la capacidad de trabajo de los equipos.
3. Interviene en los conflictos y problemas dando soluciones eficaces.
4. Delega autoridad en jefes y directivos para que estos organicen las siguientes funciones.
5. Supervisa las actividades para que estas se cumplan y se realicen de la manera adecuada.
6. Debe generar la suficiente confianza en todos los niveles jerárquicos.
7. Asigna todas las responsabilidades una vez conocidas las habilidades y conocimientos de los trabajadores de la organización.
Contenido
¿Por qué es importante una buena organización empresarial?
Es fundamental llevar los pasos anteriores, fijar estrategias y roles, preparar todos los departamentos y estructuras, porque es la base del crecimiento de un negocio y contar con una acertada organización.
1. Conseguir todos los objetivos que se han proyectado.
2. Ayuda a usar los recursos que se tiene de manera eficiente.
3. Se logra una mejor comunicación entre los miembros de la compañía.
4. Al determinar todas las funciones y roles, se gana en rapidez y eficiencia en las actividades.
5. Delimita las funciones, responsabilidades y derechos y a su vez, disminuye los esfuerzos para realizarlo.
6. Distribuye todo lo necesario para ejercer todas las actividades de manera rápida y eficaz.
Objetivos de la organización empresarial
Cuando se establece una organización empresarial lleva con ello una serie de objetivos. Uno de ellos es facilitar el trabajo, optimizar todas las funciones y los recursos y, en definitiva, hacer todo más sencillo. Para ello, existen muchosprogamas de gestión que pueden gestionar esta parte inicial que cualquier negocio necesita cuando empieza y que gracias a la ayuda que proporcionan estos programas de gestión se logra la coordinación para alcanzar las metas que se han establecido al principio.