La tasa Amazon y el IVA en el software de facturación

En el sector de la informática y las nuevas tecnologías, el término software de facturación se refiere a aquellos programas que manejan el seguimiento de los productos y servicios entregados a un cliente o conjunto de clientes. Algunos de estos programas también rastrean horas de trabajo realizado con fines de facturación. Estos tipos de programas automatizan gran parte de lo que solía ser un proceso que consumía demasiado tiempo para la preparación de facturas u otra documentación.

La productividad de la empresa se incrementa exponencialmente

Las innovadoras estructuras digitales proporcionadas por los servicios y productos de software de facturación forman parte fundamental de los motivos que han impulsado a las empresas a entrar en la nueva era digital, lo que permite una mayor productividad y una agilización en cuanto a la administración de negocios en general. Así, dentro de las industrias más potentes del panorama global, los servicios de software de facturación se han desarrollado para permitir las muchas ventajas de este tipo de facturación dentro de un campo o mercado particular.

En relación con este asunto, es conocida la Directiva europea 2008/8/CE, más conocida como la tasa Amazon, promulgada por el Consejo de la Unión Europea y convertida en una realidad en el año 2015. Esta norma afecta directamente a los bienes digitales y consiste en establecer un precio básico en toda Europa y aplicarle el IVA de cada Estado miembro.

El objetivo es fijar el IVA de acuerdo con el país de residencia del comprador y no con el del vendedor, como se hacía hasta su entrada en vigor. La razón que subyace tras esta regla obedece a una voluntad de evitar posibles casos de competencia desleal. También se quiere establecer un mecanismo de control dentro de la industria de desarrollo de aplicaciones, especialmente en estrategias de monetización de aplicaciones. Por lo tanto, el coste del desarrollo de aplicaciones móviles en España -entre otros muchos productos digitales que se podrían comprar previamente a un precio más bajo- aumenta, ya que el IVA que lleva asociado se incrementa del anterior al ​​estándar español.

Los precios de estos productos cambian de manera muy diversa en otros países

En resumen: un desarrollador tiene que pagar el IVA de cada aplicación que venda según el país de residencia del comprador, reduciendo el beneficio de monetización de la aplicación. Este cambio afecta sobre todo a los desarrolladores de aplicaciones móviles y creadores de contenido digital, pero también a los usuarios finales, que notarán este aumento en algunos productos más que en otros. Por ejemplo, el IVA sobre los libros electrónicos aumenta. Por otro lado, las aplicaciones móviles no notarán un aumento tan grande en sus precios, ya que su IVA sube en menor medida que otro tipo de artículos de normal adquisición vía online.

Como consecuencia de lo anteriormente explicado, los desarrolladores y las compañías ahora tienen que analizar la fijación de precios minuciosamente, para evitar verse obligados a ofrecer aplicaciones a precios que podrían ser perjudiciales para la obtención de descargas. Lanzar una aplicación a un precio superior al inicialmente previsto es un error que puede ser muy perjudicial para la estrategia de marketing móvil de una empresa, su modelo de negocio establecido y su retorno de la inversión.

Esta nueva facturación del IVA se aplica a los pagos asociados con las descargas, así como a cualquier otro pago realizado en las aplicaciones. Por lo tanto, la mejor opción posible es ajustar el precio de la aplicación y los precios de compras en la misma (si correspondiera).

El cambio permite a los estados miembros de la UE cobrar estos impuestos y elevarlos al IVA estándar del país, de acuerdo con las leyes aplicables a los productos electrónicos. En consecuencia, esto implica la posibilidad de un aumento en el pago para el consumidor. Las empresas y los profesionales independientes tendrán que prestar especial atención a este cambio, ya que son quienes administran sus propias cuentas. Por este motivo, y debido al actual IVA,la estrategia más extendida en España es bajar los precios, con la intención de evitar la subida en el costo para los usuarios finales.

Sin embargo, las aplicaciones y los libros electrónicos no son los únicos afectados. Existen otros productos digitales que actualmente se gravan con un alto IVA en España: banners, suscripciones a servicios digitales y contenidos audiovisuales como películas, videojuegos y canciones. Aquellas personas que anteriormente compraban productos en tiendas extranjeras (ya fuese a través de sitios web o aplicaciones) con el propósito de ahorrar algunos euros, no podrán seguir haciéndolo. Tendrá que fijarse en el porcentaje de impuestos en su país, a partir de ahora, al llevar a cabo este tipo de transacciones. La estrategia para la monetización de las aplicaciones empieza a ser una cuestión clave, por lo que debe definirse específicamente para cada país y su tasa de IVA.